3 errores que provocan una página web que no convierte
- Mario Malpica
- 14 jul
- 2 Min. de lectura

¿Tienes visitas, pero no resultados? Es un problema común. Tener una página web que no convierte significa perder oportunidades cada día. No siempre se trata de diseño o presupuesto: a veces, son errores invisibles los que sabotean tus conversiones. Aquí te explicamos tres de los más frecuentes, y cómo identificarlos antes de que sigan afectando tu negocio.
1. Tu mensaje no es claro ni está orientado al cliente
Si el visitante no entiende en 5 segundos qué haces, por qué eres diferente y cómo lo ayudarás, se irá. Frases como “Bienvenido a nuestra página” o “Somos expertos en…” ya no funcionan. Lo que necesitas es una propuesta de valor directa, visible y enfocada en resolver un problema real.
Una página web que no convierte muchas veces falla en comunicar eso desde el primer pantallazo.
Dato: el 57% de los usuarios abandona un sitio si no encuentra lo que busca en menos de 10 segundos (Nielsen Norman Group).
2. El diseño no guía a la acción
Tener un sitio bonito no es suficiente. Si tu web no tiene botones visibles, llamados a la acción claros (como “Cotiza aquí” o “Reserva tu lugar”), testimonios o secciones que inspiren confianza, es probable que estés perdiendo clientes potenciales.
Una página web que no convierte suele enfocarse más en verse bien que en generar acciones.
Errores frecuentes:
Formularios demasiado largos
Botones escondidos o mal ubicados
Navegación confusa o sin jerarquía
Falta de elementos de prueba social
3. No responde a la intención de búsqueda del usuario
Tu cliente potencial llega con una expectativa: resolver una duda, comparar opciones o tomar una decisión. Si tu sitio solo habla de tu empresa y no de cómo puedes ayudar, no conectará.
Una página web que no convierte ignora esta intención. Y eso afecta tanto al posicionamiento como a la tasa de conversión.
No todos los visitantes están listos para comprar. Algunos apenas están explorando. Por eso es clave ofrecer contenido informativo, guías o respuestas que construyan confianza antes de pedir una acción.
¿Qué hacer si tienes una página web que no convierte?
La solución no siempre es rehacerlo todo. A veces basta con ajustar los textos, reubicar botones, simplificar formularios o añadir contenido que conecte con el cliente ideal. Una revisión profesional puede transformar una página web que no convierte en una plataforma que trabaje a tu favor, día y noche.
Una página web que no convierte no es solo un sitio mal diseñado: es un sitio que no piensa en el usuario. Y eso puede resolverse. Entender estos errores es el primer paso. El siguiente es tomar decisiones informadas para mejorar resultados sin perder tiempo ni dinero.



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